Saturday, July 07, 2007

Algo se detuvo en punto muerto

Como una brisa marina.

Pasa, le refresca, le saca una sonrisa y se acaba. Su gracia se va, se pierde con el mar. Luego viene otra brisa marina, pero ya no está.

Como un pie de limón.

Cuando lo degusta por primera vez es maravilloso, dulce, suave, único. Luego hostiga, entonces se deja de lado y se bebe agua.

Como una luz blanca.

Pareciera un ángel descendiendo, ilumina tan fuerte que irradia esperanza, fuerza y amor. Pero ya luego se extraña la luz amarilla y la blanca empieza a molestar. Entonces compra una ampolleta normal.

Como un amor ficticio.

Es maravilloso en un inicio, es la eternidad, es siempre, es verdad. Mas las tontas discusiones aburren y entonces te deja de nombrar, y ese imperecedero amor se pierde en la maraña de discusiones que solo delatan, que nunca fue verdad.

La mira y llora.

Lo mira y calla bajando la mirada, no es ella la que ha dejado de amar.

Él llora de vergüenza, llora de soledad, soledad interna inmensa que no le permitio amar. Llora de desesperación por querer recuperar esa brisa marina que sintió un día sobre su rostro.

Ella calla de dolor, porque el sólo amaba a esa brisa marina, y no al mar.

Mientras el llora, ella calla, cada vez calla más.

El silencio arrebata la seguridad, la esperanza, la ilusión.

Él desesperado llora más fuerte para asesinar a ese ángel que intenta arrebatarles la verdad en un cruel silencio que se apodera de todo.

Ella se sumerge en la oscuridad y está ya tan lejos, que no alcanza a escuchar el silencio mortal, pues se pierde en mil pensamientos alimentados por su cada vez más fecunda inseguridad.

Las lágrimas ya no mojan las mejillas de él, ya está aburrido del silencio, ya no siente ganas ni de llorar. Deja de intentar.

Se la pasan compitiendo por quien tiene la verdad, tan adversas realidades que no transan ni un poco su pensar. Ella camina callada a su lado, inmersa en lagos inmensos de incertidumbre. El camina callado también, inmerso en lagos inmensos de soledad, pues la mujer de su lado se está perdiendo en el silencio mortal.